Historia del maquillaje
HISTORIA
El origen del término maquillaje se debe
en sentido etimológico a “Maquillage” (pintura del rostro de los
actores de teatro en el siglo XIX en Francia). Sin embargo, su historia
ha ido evolucionando a lo largo del tiempo hasta llegar a categorías tan
avanzadas como lo que hoy conocemos como opto cosmética.
El origen del maquillaje se remonta a muchos siglos atrás.
A lo largo de los años hemos descubierto diferentes conceptos sobre la
cosmética de color, cuyas formas y significados han ido variando en función de las civilizaciones, de la época y del lugar.
Teniendo en cuenta los aspectos
evolutivos de los cosméticos decorativos, los primeros indicios que
tenemos sobre el origen del maquillaje los encontramos en las pinturas
que nuestros antepasados tomaban de la naturaleza y que usaban para transmitir sus estados anímicos o su papel social (viudedad, luto, virginidad, etc). El maquillaje desde su origen ha servido como instrumento de comunicación no verbal remontándose su uso a la prehistoria periodo en que se aplicaban arcilla en la cara.Si hiciésemos un recorrido histórico, comprobaríamos las diferentes funciones que adquiría el maquillaje en cada época teniendo en cuenta la gran influencia que ejercían en él los aspectos sociales, económicos, espirituales, etc.
Los primeros en utilizar el maquillaje fueron los egipcios, ya que
muchas tumbas de los mismos contienen productos cosméticos: las
mismísima Cleopatra utilizaba un lápiz labial rojo que se hacía con el carmín de los escarabajos.
Sin embargo, con el paso del tiempo el maquillaje
cayó en desuso, y desde la Edad Media hasta finales del siglo XIX dejó
de utilizarse. Solo las prostitutas y las mujeres de clase baja se
atrevían a usar color en sus rostros, mientras que las clases altas se
jactaban de su palidez.